jueves, 22 de marzo de 2012

LENCERIA MONINA: LA ELECCIÓN DEL COLOR DE TU ROPA INTERIOR DESNUDA TU PERSONALIDAD............

LENCERIA MONINA: LA ELECCIÓN DEL COLOR DE TU ROPA INTERIOR DESNUDA TU PERSONALIDAD............

LA ELECCIÓN DEL COLOR DE TU ROPA INTERIOR DESNUDA TU PERSONALIDAD............

¡Cuidado! El color desnuda tu personalidad
Negro, blanco, rojo… Más allá del gusto personal, ¿alguna vez te preguntaste por qué usas los tonos qué usas? ¿O por qué elegís muy especialmente un conjunto para una determinada ocasión? En materia de lencería, ninguna decisión resulta casual. Te contamos qué dice de vos-y de tus intenciones- el color de tu ropa interior.

Cada vez que nos vestimos, le prestamos muchísima atención a los colores que elegimos y a cómo los combinamos. ¿Pero qué pasa con la lencería? La mayoría de las veces, no es algo que pase a segundo plano, y menos aún cuando estamos en plan de conquista o con ganas de acalorar un encuentro que se las trae.
La tonalidad es un elemento fundamental a la hora de seducir y describe tu personalidad como nada. Tené cuidado: los hombres no son tontos y el color delata tus inteciones.
Develamos el misterio para que puedas hacer la elección correcta de acuerdo a la ocasión y la ropa interior se
Negro, sensual y misterioso. Por un lado, es un color que estiliza y ayuda a disimular esas imperfecciones que a veces molestan. Pero, además, denota la elegancia natural de quien lo viste y, si lo sumamos al encaje y las puntillas, tiene un efecto erótico inigualable en ellos. Es la elección ideal para una noche de amor. ¿El resultado? Te vas a ver como una verdadera diosa del sexo.
Blanco, sencillez y dulzura. Suele ser el favorito de las mujeres clásicas y poco “lanzadas”. Naive y sweety, no es el indicado a la hora de seducir… A menos que quieras encantar dando una imagen de inocencia e ingenuidad.
Rojo, pura pasión. Es perfecto para las mujeres activas, atrevidas y que se llevan el mundo por delante. Así como el negro aporta un toque de misterio, éste inspira erotismo absoluto. Ardiente y fogoso, un conjunto rojo destila energía, fuerza y lujuria. ¡Perfecto para elevar la temperatura y enloquecer a tu hombre!







Natural, aburrido y anti-sexy. Es el tono favorito de las mujeres prácticas pero resulta demasiado poco excitante. ¡Ni se te ocurra usarlo para seducirlo! Vas a conseguir el efecto contrario…
Rosa, romanticismo pleno. Además de dar suerte a fin de año y de ser un regalo casi obligado en el arbolito, las que eligen lencería de este color suelen ser mujeres muy sensuales. Románticas pero picantes a la vez, las que usan este tono disfrutan de dar una imagen infantil y juguetona en la cama. Toda una estrategia de seducción con un encanto particular.
Azul, tranquilidad natural. Es la tonalidad favorita de las mujeres relajadas y seguras de sí mismas. Es la opción perfecta para tomar la iniciativa en una noche de caricias, abrazos y ternura.
Amarillo, felicidad total. No es un tono típico para la ropa interior, pero es el elegido por mujeres alegres, desinhibidas, modernas y libres. En verano, es perfecto para resaltar el bronceado.
Verde, independencia y naturalidad. Tampoco es un color lencero habitual, pero es el favorito de las más osadas e independientes. Lo lucen con mucha seguridad… ¿Vos sos de la que te animás?
Gris, triste y apagado. Es el elegido por las mujeres que adoran pasar desapercibidas. Es un tono súper apagado que revela cierta tristeza y mucha quietud. Para una velada inolvidable… ¡Totalmente contraindicado!


¿Cuál es tu color favorito de lencería?

¿Qué prenda y qué tono elegís a la hora

romper corazones y volverte inevitable?




domingo, 3 de julio de 2011

El "tanga": historia dramática de una minúscula prenda de vestir

El "tanga": historia dramática de una minúscula prenda de vestir


Una española fue ejecutada en el siglo XVII por llevarla en público
La tanga, la más minúscula de las prendas de vestir en público, tiene tras de sí una excitante historia, que comienza en una isla del Pacífico y halla su punto culminante más dramático en la España de la Inquisición, donde una bella mujer, Yolanda Luccara, fue ejecutada en público por usar y promocionar la citada prenda. La investigación que ha conducido al descubrimiento de estos datos ha sido realizada por una periodista alemana interesada en la etnología del vestido.




Un documentado estudio etnológico en torno a una pieza de vestir, o mostrar, según perspectivas, ha desvelado un viejo enigma de modistas y profanos. La periodista alemana Anja Bergelson, que presentará este mes una obra sobre tan espinosa cuestión, afirma en su libro que el tanga no procede de Brasil, sino de la isla chilena de Santa d'Or, y además cuenta con una protomártir: la española Yolanda Luccara, ejecutada en Madrid el 1 de abril de 1660 por lucir tan sugestiva prenda.La señora Bergelson ha revisado concienzudamente, durante dos meses, los documentos del pequeño archivo de Lacipo, capital de esta minúscula isla del Pacífico, situada entre las de Juan Fernández, al Sur, y las de San Félix y San Ambrosio,. al Norte. Si los documentos no mienten, Santa d'Or era un lugar apacible cuando llegaron los españoles. Sus hábitantes, que conservaban la prehistórica cultura de los concheros, pueblos que hacían de los moluscos su principal sustento y decorado, recurrían también a las conchas (tongos) para cubrir parcialmente el cuerpo femenino. Los pescadores isleños estaban al corriente, por lo demás, de una incidencia que se producía en tierra: también mediante conchas sus mujeres les informaban de lo que ocurría en el poblado. Y no sólo eso. Mientras regresaban a tierra los pescadores, sus esposas, desde la playa, les revelaban púdicamente sus intenciones amorosas, o su estado físico, cubriendo sus zonas corporales más peculiares con caparazones de determinado color y especie, cada uno para un estado de ánimo e intención diferentes.
Pero en 1640 acertó a naufragar por aquellos andurriales el español Yáñez Iglesias, que se proponía dar la vuelta al mundo en un velero en el que también viajaba su hermosa mujer, la hispano-italiana Yolanda Luccara. El jefe de los concheros ofreció su ayuda al español, pero a cambio de que le concediera algo que pedirían las mujeres de la isla. Estas exigieron que se les diese el tejido de las velas de la nave. Yáñez se vio obligado a trocar la aventura de la vuelta al mundo por el prosaico negocio de vender telas al por menor. Las isleñas se repartieron el tejido, y a las pocas horas, allí donde antes lucían conchas, ahora lucían minúsculas prendas apenas mayores que los primitivos tongos anteriores a la colonización. La hermosa Yolanda, cautivada por aquel desfile de modelos, cedió a la tentación y se dotó de una prenda similar. Como pudo, Yáñez Iglesias regresó al continente y se estableció en Salvador (Brasil), donde montó un negocio de telas multicolores para la fabricación de tongos, o tangas, como les llamarían los brasileños. Aquel mismo año, Rembrandt y Velázquez triunfaban en las cortes europeas con sus hermosas mujeres al natural o vestidas con ampulosos ropajes, respectivamente. Yáñez creyó llegado el momento de exportar su tongo-tanga a Europa, y se presentó en Madrid con su esposa. Yolanda decidió lucir la prenda ante un grupo de amigos. Enterada la Santa Inquisición, Yáñez y Yolanda hubieron de comparecer ante los jueces, que condenaron a ambos a ser ejecutados en la horca como «personas inmorales» y «promotores de graves escándalos públicos». La sentencia se cumplió el 1 de abril de 1660, delante del Palacio Real. Todavía en 1710 escribiría un misionero español que llegó a Santa d'Or para evangelizar a los concheros que aqueleres «seguían empeñadas en lucir aquellos inmorales andrajos».

    
Cada bombacha con su nombre

Braga: es el más convencional. Cubre más que los tangas y menos que los culottes.
  



Tanga: deja las nalgas al descubierto, y la microtangas dejan casí el puvis al descubierto

Colaless: prenda que consiste en solo un hilo de Lycra o algodón

que deja las nalgas totalmente al descubierto y toca el centro del ano

y casi tapa o cubre la vulva. Nos pusimos serios.

Culotte o culotes: cubren más las nalgas. Antes y hasta mediados del siglo XX se le llamaba así a una prenda que llegaba hasta las rodillas.En francés llaman culotte en la actualidad (siglos XX y XXI) al equivalente español "bragas".
Las tangas son para usar con pantalones (porque no marcan la cola) y culottes para vestidos y polleras".




¿COMO LAS LAMAN EN LOS DISTINTOS PAISES?
 En Argentina y Uruguay: bombacha (si es muy delgada por detrás, se le llama tanga ).

En Bolivia y Perú: calzón o trusa (si es muy delgada por detrás: tanga , o incluso hilo dental).

En Chile: calzón, churrín, calzones o cuadros (si es muy delgada por detrás, colaless)

En Colombia: cucos, calzones, pantaletas o panties (si es muy

delgada por detrás: tanga , o incluso hilo dental).

En Cuba: blúmer o blume, que viene del vocablo inglés bloomer.

En Ecuador: Antiguamente se usaba la palabra calzonarios. Actualmente se los denomina de acuerdo al tamaño: "calzón" cuando son grandes, " tanga " cuando el área que cubre es más pequeña y se denomina "hilo dental" cuando apenas cubre la zona íntima por delante y es muy delgado por detrás. Para el caso de prendas masculinas se usa calzoncillos.

En Costa Rica: calzones o calzón, blúmer cuando es grande o amplio, tanga si no cubre totalmente las nalgas o hilo si no las cubre del todo.

En El Salvador: Antiguamente se usaba "bloomer pierna alta".


Actualmente se los denomina de acuerdo al tamaño: "calzón", "bloomer" o "Cacheteros" cuando son grandes, " tanga " cuando el área que cubre es más pequeña y se denomina "hilo dental" cuando apenas cubre la zona íntima por delante y es muy delgado por detrás. Para el caso de prendas masculinas se usa calzoncillos.

En España: bragas o braguitas (si es muy delgada por detrás, tanga ).

En Panamá y Puerto Rico: panty (del inglés panties).

En México: calzones, chones (términos usados indistintamente

para las prendas masculina y femenina, el segundo es un eufemismo del

primero) o pantaletas (si es muy delgada por detrás, tanga ).

En República Dominicana: panties (si es muy delgada por detrás: tanga , o incluso colaless) y blumen, que proviniene del vocablo inglés bloomers.

En Venezuela: pantaletas (si es muy delgada por detrás, tanga o

hilo dental).
En otros países de América Latina es llamado

"calzón de mujer" o


"calzoncillo femenino".


               

                       

domingo, 26 de junio de 2011

LENCERIA MONINA: Corpiños: Tips y tipos

LENCERIA MONINA: Corpiños: Tips y tipos: "El corpiño, sujetador, sostén o brassiere, es un elemento muy importante en el vestir diario de cada mujer, ya que ayuda a destacar y resalt..."

Corpiños: Tips y tipos

El corpiño, sujetador, sostén o brassiere, es un elemento muy importante en el vestir diario de cada mujer, ya que ayuda a destacar y resaltar nuestros atributos físicos, ayudándonos a lucir un buen escote o simplemente encargándose de mantener segura toda la zona superior mientras hacemos deporte.

El corpiño, sujetador, sostén o brassiere, es un elemento muy importante en el vestir diario de cada mujer, ya que ayuda a destacar y resaltar nuestros atributos físicos, ayudándonos a lucir un buen escote o simplemente encargándose de mantener segura toda la zona superior mientras hacemos deporte.

- Con soporte medio: indicado para personas de busto regular, ya que ayuda a darles una mejor forma, modelando la figura. Estos se caracterizar por tener los breteles con un ancho promedio.

- Con soporte medio: indicado para personas de busto regular, ya que ayuda a darles una mejor forma, modelando la figura. Estos se caracterizar por tener los breteles con un ancho promedio.

- Con push up taza soft: son un nuevo concepto en corpiños son armados y presentan la característica de no poseer costuras. Lo que son de gran ayuda a la hora de usar remeras ajustadas, quedan elegantes. Son “armados” o “pre-formados” presentan una forma redondeada, armada y con una delgada capa interna que hace que el corpiño no se deforme. Por otro lado se suma el milagroso push up, que según la posición, realza el busto, lo junta y lo levanta.

- Con sujetador completo: estos son más conocidos como los deportivos, súper cómodos para salir a correr o hacer deporte ya que mantiene todo en su lugar y ajustado sin dolor o molestia alguna. La mayoría son lisos y de algodón, no son sexys ni dan forma pero es ideal para aquellas que necesitan para sentirse seguras.
Repasamos algunos tipos de corpiños, pero al momento de comprarte uno, fíjate en los siguientes tips:


- Las tazas no deben arrugarse ni doblarse, deben estar completamente llenas.

- Las varillas o el aro de la taza no deben enterrarse en los senos.

- La espalda debe estar cómoda, no haciendo que se formen rollitos en esa zona, si esto ocurre es mejor comprar un talle más.

- El corpiño no debe dejar marcas en la piel, si es así cambia al talle siguiente.

- La tira de la espalda no debe subirse, si esto ocurre es porque el corpiño que estás usando es muy pequeño para tu busto.

- La taza debe contener completamente al seno, con excepción de los corpiños con push up, que están diseñados para lucir un busto más prominente.

Suerte en tu próxima compra!.

MONINA



lunes, 20 de junio de 2011

LA HISTORIA DEL CORPIÑO




Ya existía en el siglo V







La lucha contra la gravedad es muy antigua. Ya en el siglo V, en Sicilia, se dibujaban a doncellas ataviadas con corpiños. Hace cuatro mil quinientos años, en la isla de Creta, las damas usaban una prenda que elevaba sus senos para exhibirlos desnudos fuera de su ropa. En Roma y Grecia, en tanto, las mujeres sostenían sus pechos con bandas de seda.


Su origen es difuso. Y varios quisieron otorgarse el mérito. A mediados del siglo XIX, el neoyorquino Henry Lesher patentó unos armazones metálicos. En 1863 Luman Chapman registró un medio corsé, con lazos cruzados en la espalda y ajustados sobre el abdomen. En 1890 se vendían por correo. Pero el corsé moldeaba el cuerpo con una fuerza descomunal.

En 1876, la diseñadora Olivia Flynt, patentó en Boston un sustituto del torturador corsé. Creó un sujetador, que cubría la mitad superior del torso, sosteniendo cada pecho en una bolsa de tela. Innovadora, imaginó otra versión con un acolchado adicional para los bustos pequeños.

Tiempo después, Charles Moorehouse diseñó copas de hule, rellenas de aire, con tirantes. La aparición del nylon en 1939 posibilitó la confección de fibras tipo lycra e impulsó la industria del corpiño.

No faltaron ideadores y reformadores del íntimo artículo. También varios forcejearon por la autoría del término brassiere.

De todos modos, la invención del corpiño como hoy se conoce se le atribuye a la norteamericana Mary Phelps Jacob. Junto con su criada, dibujó dos triángulos y los trasladó a simple pañuelos atados con una cinta, con el fin de poder usarlo debajo de un vestido de noche escotado. El 3 de noviembre de 1914 registró su "brassiere sin espalda" y abrió un taller para producir sostenes. Al poco tiempo vendió la patente a la compañía Warner Brothers de Connecticut, por sólo 1.500 dólares.

Aunque cueste creerlo, la Primera Guerra Mundial impulsó el uso del corpiño, aunque su creadora era pacifista y fundó la organización Mujeres contra la Guerra. En Estados Unidos se inició una campaña para que las mujeres dejen de usar corsés. Pretendían ahorrar 28.000 toneladas de metal, el equivalente a dos buques de guerra. En 1945, el corpiño dejó de ser una prenda íntima para formar parte de la pública bikini. Hoy los hay hasta invisibles.













domingo, 19 de junio de 2011

Colores y brillo. Infaltables, los clásicos de siempre el negro, el blanco y el rojo dicen presente en conjuntos y piezas. Además, el gris en todas sus variantes (y con mucho brillo), el petróleo, los morados y el rosa son los tonos anti-frío. ¿Sabías que el color de tu ropa interior desnuda tu personalidad? ¡Enterate!

Cada vez más, la lencería sigue las tendencias del mundo de la moda y se convierte en un aspecto fundamental de nuestros outfits. Te contamos lo que no debe faltar en el cajón de tu placard
También se imponen las bombachas apenas por debajo de la cintura y anchas en las caderas, ideales para modelar la figura y disimular esos “rollitos” molestos.
Texturas sexys. El encaje es el protagonista central del invierno, seguido de cerca por el tul y las transparencias. La clave: resaltar las formas y potenciar la feminidad.
Colores y brillo. Infaltables, los clásicos de siempre el negro, el blanco y el rojo dicen presente en conjuntos y piezas. Además, el gris en todas sus variantes (y con mucho brillo), el petróleo, los morados y el rosa son los tonos anti-frío.